Monday, November 19, 2007

Hay mucho rencor todavia. No sé si rencor sea la palabra correcta. Lo que se es que vengo arrastrando esta carga pesada, de malos ratos sin resolverse, de enfados y limitaciones viejas; muchas heridas que no acaban por sanar. No puedo verlos como los veia antes...eso que nos unia, lo poco que habia, se ve en hilachas ahora. Quizas se pueda reparar. Depende de cada cual.

Creo que necesito terapia: llevo un coraje viejo encima, unas ganas de vengarme, una sensacion de que nada se a resuelto. Esto ultimo es particularmente cierto, ya que si ocurria algo, ellos se entendian en un circulo cerrado, procesando los eventos a su manera, resolviendolo entre ellos mismos, llegando a sus falsas concluciones de una percepcion atrofiada por el prejuicio y la ignorancia. Y yo, en el limbo.

Yo trato, particularmente con ella, la mas cercana y lejana a la vez, pero algo me limita, una parte de mi me aguanta el pie para seguir adelante con ellos. Nada espiritual, nada de terceras partes: algo interno. Algo que con el paso del tiempo se ha desarrollado: una bola de nieve. No puedo ponerle el dedo encima...

Saturday, October 14, 2006















Preludio.


Mis pensamientos. Mis percepciones.
Expuestas ante unas piernas abiertas
Llamadas mundo.

Mis angustias, mis pasiones; Él
Espacio vacio que busca un recoveco
Bien escondido dentro de la piel,
Se halla expuesto, tendido; suciedad
Niebla mis temores.

Micromundo bajo lupa,
La barba de la vieja se arrastra por mis pies.
Me rozan los dedos cortados, me dan cosquillas;
Un hueso se me entierra en la cien.
La risa yace en un dolor de alma.

Controladas las ansias de desnudar el alma;
Mi espíritu se subleva sobre una excusa.
Rianse, maravillense,
Ante la cotidianidad de una hormiga.
Asesina.